Consecuencias psicológicas de una violación

Para poder empezar a hablar de este tema, es necesario que aclaremos cual es el significado de la palabra violación. Violar tiene que ver con el hecho de quebrantar, de infringir. Se viola cuando se desobedece una ley o una regla, cuando llega a quebrantarse un pacto, o  cuando se penetra un lugar sagrado o prohibido, por ejemplo una tumba.

En este caso hablaremos de la violación sexual, que sucede cuando se tiene una relación “carnal” con otra persona a la fuerza y  en contra de su voluntad. Esta relación puede ser vía vaginal, anal, oral y se puede realizar con el pene, los dedos o hasta con la ayuda de objetos.  Se dice que es una violación, cuando para lograr su propósito el culpable usa la fuerza o la coerción, o cuando la victima por cualquier causa se encuentra privada de razón o sentido para consentir la relación.

De todas las violaciones que se llegan a cometer, solo muy pocas son denunciadas, y por lo tanto, muy raros casos son tratados por especialistas. La vergüenza, la culpa, el miedo, la duda y el daño ocasionado, son algunas de las razones por las que muchas victimas de una violación no lo hablan y por lo tanto no reciben la atención necesaria y especializada para poder recuperarse de un evento como este.

Además de las lesiones físicas que provoca una violación, es probable que después de este evento la persona se sienta confundida, aturdida, desesperada, triste, enojada, con coraje etc. Son innumerables los sentimientos que se presentan ante esta situación, y  obviamente, también llegan a presentarse comportamientos diferentes a los habituales, como problemas con la alimentación, con el sueño, ansiedad, nerviosismo, aislamiento, entre otros.
 
La Asociación de Mujeres sobrevivientes de Abuso Sexual(1), menciona algunas de las consecuencias psicológicas que sufren las victimas de una violación o abuso.  

• Tienen la idea de que son diferentes a los demás y en algunas ocasiones, piensan que tienen un gran secreto que “deben” guardar.
• Desconfianza hacia los demás
• Confusión en el manejo de la sexualidad
• Existe una sensación de no agrado hacia el propio cuerpo
• Dificultad para expresar sus emociones
• Necesidad de controlar
• Problemas para establecer limites y ser responsables de ellas mismas
• Dificultades en diferentes áreas de su vida (laboral, escolar, emocional, relaciones personales y de pareja, etc.) 

Algunas victimas, llegan a presentar problemas para relacionarse con los demás, se vuelven más retraídas, aisladas, tímidas o más conservadoras, por así decirlo. Hay otras que al contrario, a raíz de la violación presentan conductas promiscuas, se vuelven rebeldes, tratan de llamar más la atención, recurren a las drogas y alcohol, y comienzan a tener muchas parejas sexuales. De estas dos probables conductas, ninguna es mejor que otra, simplemente son maneras de responder a este acto generador de angustia. Habrá personas que sientan la necesidad de tener relaciones sexuales constantemente o quienes eviten tenerlas, y otras que las tengan sólo por “obligación”, aunque les sea psicológicamente y físicamente doloroso. Lo que si es seguro, es que ninguno de estos tipos de comportamientos resultan ser sanos para las victimas de violación.

Finalmente hay que decir que es importante buscar ayuda psicológica, hablar del tema y denunciar cuando se sufre una violación. Existen terapias individuales o terapias grupales, en donde se encontrará el apoyo necesario para poder sanar las secuelas provocadas por una violación. Lo más difícil es hablar y buscar la ayuda, una vez teniéndola, solo déjate ayudar.